2 dic 2007

Beny Moré


"No quiero rumba yo quiero cha-cha-cha".

Uno de los espectáculos mas curiosos que se pueden ver en casa del Profesor son los días de colada, el Profe anda todo el día en pijama por la casa con sus zapatillas de cuero amarillo y si hace un poco de frío, con un grueso albornoz de toalla blanco. Los días que pone lavadoras se le puede ver con las puertas del comedor abiertas de par en par, dejando que el sol inunde todos los rincones de la casa, la música a todo trapo y mientras va sacando las cosas de la lavadora, va cantando y bailando con las pinzas de madera en la boca. Una de sus bandas sonaras preferidas para esos días es esta; Benny Moré el Bárbaro del Ritmo con su Orquesta Gigante.

Nadie como este cubano para interpretar el son-montuno, la guaracha, el cha-cha-cha, el changuí o el guaracha-swing. Bartolomé Maximiliano Moré -Beny o Benny para los amigos- no solo era un carismático director de orquesta a lo Xavier Cugat, sino que fue la mejor voz de su época y tremendo bolerista, he visto al Profesor dejar caer alguna lágrima, mientras coloca las ristras de calcetines negros en el tendedor y escucha “Mi amor fugaz”, “Preferí Perderte”, “Oh! Vida” o “Que me hace daño”. Como decía Diego A. Manrique; Benny fue “como James Brown pero en cubano”, “inmenso sonero” e “incandescente bolerista”, “dinámico bailarín y un carismático líder de orquesta”. Verlo cantar, bailar con los brazos abiertos o dirigir la orquesta con su famoso bastón era una experiencia maravillosa, desgraciadamente el archivo YouTube está plagado de escenas de las películas que interpretó allá en México donde se hizo famoso, antes de volver a sus isla y que generalmente eran producciones mediocre donde lo disfrazaban como payaso.

Benny Moré. “Vertiente Camaguey”. (3.44).


Campesino hambriento en los pobres campos cubanos, de cantante callejero pasó a ser la voz del conjunto Matamoros. En México le cambiaron el nombre de Bartolo por Beny y firmó por la RCA Victor. Allí cantó también con Dámaso Pérez Prado y se acercó al jazz, después con Bebo Valdés y con Mariano Meserón.
En 1953 formó su legendaria Orquesta Gigante. Déjense cautivar por la rotundidad de sus metales, su electrizante percusión y se enamoraran de sus cambios de voz y sus cacareos, muchos le deben todo, de él surgieron los famosos estribillos terminados en “sabor!” o “azúcar!”
Una cirrosis hepática –todos sabemos la capacidad bebedora de los cubanos- le fue diagnosticada a finales de los cincuenta, pudo dejar de beber pero no frenar su ritmo de trabajo, hasta que el 19 de febrero de 1963 falleció en el Hospital de Emergencias habanero.

Benny Moré. “Hoy como ayer” (2.07)

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6 Comments:

Blogger nancicomansi said...

SIIIIIIIIIIIIIII...venga......pero eso no vale bailarlo con batín y zapatillas...se me ha de poner el traje dorado bien "apretao" con la consiguiente pajarita requebienpuesta, y luego sacar a bailar un "bombón" de curvas mareantes y tacones de susto, si no, no vale...
AH!!!! se siente...;)

Nos dió por el b/n hoy...

3:34 p. m.  
Blogger Margot said...

Yo hago lo mismo el día de la colada pero sin Moré, le he escuchado pero poco más... En esos momentos me inclino por la copla, recuerdos, digo yo.

Voy a ver si me lo agencio y te cuento la experiencia!! y mis vecinos confirmarán lo que ya intuyen: tienen una inquilina loca y que canta fatal pero sin ningún sentido del ridículo, jajaja.

11:50 a. m.  
Blogger MeTis said...

si, a mi tambien me han entrado ganas de hacer la colada :-)
no esta mal, aunque a mi el cubano que me gusta es compay segundo.
mire usted, ahora me ha dado por el jazz quiet.

casi casi de su generacion eh??

petonets

3:34 p. m.  
Blogger xnem said...

A ver dice el Profe que gracias por sus palabras señoritas, desde que estamos en este veranillo de San Martín, el solecito parece que lo revive como el agua a los caracoles y está muy contento y sobre todo bailón, ahora le ha dado por la CWR.

Señorita nanci, a veces se pone muy elegante a su estilo, tiene el profe una corbata negra finita de la guerra del catorce, unos zapatos negros puntiagudos a juego del los sesenta y una camisa IKE –sin estrenar!- que este también lo guarda todo, aunque yo empiezo a temer que es algo así como el síndrome de Diógenes.

Margot, me dice el Profe que AYER –sincronicidades de Jung dicen por ahí- leía lo siguiente. “Libro del anhelo”;

“Seguí la carrera
Del caos al arte
Deseo es el caballo
Depresión el carro

Navegué como un cisne
Me hundí como una roca
Pero mi sentido del ridículo
Quedó atrás hace tiempo

Mi página estaba demasiado blanca
Mi tinta era demasiado fina
El día no escribía
Lo que la noche anotaba

… De un tal Leonard Cohen.
Ya le he pedido que un día nos hable de él.

Viva metis manque pierda.
Tiene usted toda la razón, ya me ha pedido el Profe que le consiga una peli de Win Wenders que habla de ese señor que quiere verla.

9:21 p. m.  
Blogger la gata said...

Me ha encantado este post Professor, pero eso usted ya lo sabía. Yo tb bailo de esa guisa a veces...Me consuela saber que no soy la única...

11:26 p. m.  
Blogger Recomenzar said...

Me ha encantado tu blog, lo único me cuesta donde dejar el comment
Abrazos desde una noche intensa

1:36 p. m.  

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